Agencia EFE.- La Portavoz de la Federación Humanista del Centro de las Culturas, Sara Tajuela, ha calificado de "caza de brujas" la nueva ley italiana de Extranjería, recientemente aprobada por el parlamento de ese país y que entró en vigor el pasado 8 de agosto. Continúa...
La federación ha entregado un manifiesto en la Embajada de Italia en España, en el que exponen su rechazo a estas medidas y, por el contrario, invita a fortalecer el encuentro entre culturas y creencias en lugar de fomentar la desconfianza.
El denominado "Paquete de Seguridad" impone medidas como el encarcelamiento de inmigrantes en situación irregular así como el de cualquier persona que alquile su casa a un indocumentado.
Desde el Centro de las Culturas consideran que esta Ley no soluciona ningún problema y asocia de manera injusta la inseguridad con los inmigrantes 'sin papeles', a los que se considera delincuentes por el mero hecho de no tener sus papeles regularizados.
En una entrevista con Efe, la portavoz de la Federación, Sara Tajuelo, afirmó que esta nueva ley "es una verdadera amputación de los derechos y libertades de seres humanos cuyo único delito es estar en Europa buscando un futuro mejor para ellos y sus familias".
La portavoz humanista ha destacado otros aspectos negativos de la normativa, como la obligación de denunciar ante la justicia a los 'sin papeles' o la implantación de "rondas de ciudadanos" que patrullan de forma voluntaria las calles, las cuales se teme que acaben convirtiéndose en un instrumento represor controlado por los ultraderechistas de la Liga Norte.
"Las personas que han impulsado esta caza de brujas en Italia parecen haber olvidado que muchos de sus paisanos también tuvieron que inmigrar en el pasado", señaló.
Respecto a la posición en la que quedan los inmigrantes frente a la nueva legislación, Tajuela denunció lo que considera "un mercadeo de mano de obra", porque "cuando les interesa les permiten estar, y cuando no les expulsan".
Asimismo, advirtió del riesgo de que esta tendencia "retrógrada" se extienda a otros países de Europa, incluido España, ante lo que no dudarán "en alzar la voz y manifestarse en contra" si se da el caso.
"Instamos a las autoridades italianas y del Parlamento Europeo a que trabajen en pro de la diversidad cultural y del fortalecimiento de los puntos de encuentro entre las culturas", manifestó.